Sant Mateu, la carrera que nunca defrauda

Este domingo hemos corrido en Sant Mateu!

Este domingo hemos corrido en Sant Mateu, primera prueba del Campeonato MotoDes, como ya es costumbre, participando en la Categoría Rally TT.

El sábado por la mañana partimos en dirección a tierras castellonenses con mi familia, que tanta falta hace en este tipo de pruebas. Sinceramente, no salía con todas las fuerzas ni motivación con la que acostumbro a ir a las carreras, y es que desde el jueves tenía fiebre, condicionante sin duda en este primer evento de la temporada. Cuando llegamos, pasamos las verificaciones a nuestra moto y la dejamos descansando en el parque cerrado durante toda la noche.La organización-como siempre impecable-nos facilitó los nuevos roadbooks con léxico FIM .La verdad, tenía muchas ganas de probar esta nueva manera de navegar. Mucho más intuitiva, con aspecto más claro y que sin duda es un buen entrenamiento para nuestro objetivo: el Dakar 2018.

Una de las cosas más bonitas de disputar un rally de estas características es poder reencontrarte con pilotos amigos y sus familias, con los que pasamos una bonita noche de sábado cenando en el paddock y conversando sobre todo lo que nos espera en esta nueva temporada tan emocionante. Eso sí, nos fuimos a dormir pronto, había que estar descansados para el domingo, aunque no pasamos demasiado buena noche… ¡el frío nos caló hasta los huesos!

Aun así, por fin me desperté sin fiebre, pero entonces aparecieron otros problemas… Después de 2 días enfermo, el azúcar se dispara y salí a la pista con niveles superiores a los 300, ¡una burrada! Así que no pude desayunar ni comer nada hasta la segunda asistencia, a eso de las 13h, y teniendo en cuenta que salimos a las 7:53h. En esta segunda parada ya pude reponer fuerzas, pues los niveles habían bajado hasta 90 y fue en el final de carrera donde me pinché insulina para poder neutralizarlos. Lo más importante, como siempre, el propio control, imprescindible para cualquier persona con DT1.

Llegamos a meta a las 16.40h con muy buenas sensaciones, ¡y es que no era para menos! Pese a todas las adversidades, finalizamos en octava posición (18º en la general). Una carrera exigente, de más de 300km-de los cuales 75 fueron cronometrados-y que transcurrieron por senderos muy divertidos, estrechos y con pistas rotas, ya que los días previos llovió.

Sant Mateu nunca defrauda, y es que si por algo se caracteriza, es por su dureza: mucho frío, terreno muy bueno y exigente, sin asistencia por problemas técnicos y con una fiebre que no me ha dejado dar el 100%. Pese a todo, unos resultados de los que sentirse orgullosos: octavo en categoría Rally TT a apenas 18 minutos del líder.

¡Gracias a todos por vuestro apoyo! ¡Seguimos sumando kilómetros!

¡Gas e insulina…¡que no falte!